Si estás pensando en hacer una reforma en casa, es posible que te surjan las dudas en torno a cómo distribuir la cocina. Se trata de uno de los espacios en los que podemos encontrar mayores diferencias en el antes y después de una reforma, ya que nos da mucho juego a la hora de ubicar cada uno de los elementos imprescindibles en esta estancia.
Si únicamente pudieras exigir una característica a la nueva distribución de tu cocina, lo más probable es que te decantes por una estancia ante todo funcional. Sin embargo, la experiencia nos dice que puede tratarse de un espacio tan estético como práctico; ahora bien, es imprescindible adaptar los elementos a la forma que presente la cocina.
En este artículo te contamos cómo distribuir una cocina según su forma y extensión y te aportamos algunos consejos a nivel funcional y a nivel estético, para que puedas presumir de tu vivienda en todos los planos posibles. Quieres comodidad y practicidad al cocinar al mismo tiempo que te sientes en casa y no en un simple espacio de trabajo. Es justo lo que buscamos y queremos compartirlo contigo.
Factores estéticos imprescindibles para tu cocina
Aunque la finalidad principal en la distribución de una cocina debe ser práctica, es evidente que si la estética no es de nuestro agrado, no podemos sentirnos del todo a gusto cuando trabajamos en la estancia. A continuación te ofrecemos algunas de las principales recomendaciones que estimamos oportunas en este sentido:
- Trata de mantener los electrodomésticos alineados con los muebles. Puede que necesites mayor espacio en la nevera, por ejemplo, y existen opciones maravillosas que tienen un mayor fondo, pero sobresalen de la línea principal. Siempre hay alternativas para evitar esto.
- Los muebles altos no son, en general, el elemento más estético en la distribución de una cocina, pero resultan imprescindibles. Reunirlos en una sola pared hará que el resto de la estancia se vea más despejada.
- Cubrir con paneles los electrodomésticos, utilizando la misma estética que en el resto del mobiliario, genera una uniformidad que mejorará notablemente tu cocina.
- No te dejes llevar únicamente por las modas. Si estás pensando en cómo distribuir tu cocina, valora todas las posibilidades para generar un espacio más amigable. Un ejemplo de ello es la ubicación del horno: aunque parece que no se lleve debajo de la vitrocerámica, en algunos casos es la opción más estética.
Cómo distribuir una cocina para que sea funcional
Volviendo a la cuestión central de la estancia, la practicidad y la funcionalidad, también encontramos un buen número de consejos que pueden ayudarte a decidir cómo distribuir tu cocina. Desde luego, necesitamos un espacio cómodo y eficiente a la hora de trabajar, para lograrlo puedes aplicar estas recomendaciones:
- Trata de instalar los puntos principales de trabajo en el centro y con espacio a ambos lados. Pegar el fregadero o la cocina a la pared es un error a nivel funcional.
- Distribuye las esquinas de manera inteligente. Siempre van a resultar incómodas por el choque de puertas en electrodomésticos y almacenaje, pero no pueden quedar vacías porque las necesitas. Trata de combinar elementos que no se utilicen habitualmente al mismo tiempo.
- Si quieres que una ventana presida tu fregadero -estéticamente es genial, en eso estamos de acuerdo-, ten en cuenta que deberás recurrir a ventanas correderas o a un grifo abatible para que no interfieran entre sí.
- Aprovecha la tendencia de los muebles y cajones modulares, porque, además de resultar estéticos, también son prácticos y ocupan menos espacio.
- No te olvides de dejar aparte un lugar para los pequeños electrodomésticos. Cada vez tenemos más y ocupan más espacio, así que no podemos olvidarnos de ellos.
- Ubica los elementos teniendo en cuenta las combinaciones de uso habituales. Por ejemplo, que la papelera esté cerca de la cocina para tirar los residuos y el fregadero cerca del lavavajillas para enjuagar los platos antes de meterlos.
Cómo distribuir una cocina según su forma
Por otro lado, a la hora de entender cómo distribuir la cocina es fundamental tener en cuenta la forma de la estancia. Esto es algo que no podemos cambiar, así que debemos adaptarnos. No obstante, no lo veas como un problema, sino como un reto: ¡sea cual sea la forma de tu cocina, seremos capaces de encontrar la solución perfecta!
Las cocinas con isla, una moda funcional
Las cocinas con isla son una de las apuestas más habituales en los últimos tiempos. Probablemente, se trate de la opción más estética y funcional de todas; sin embargo, no siempre es la más recomendable. Necesitas un gran espacio para colocar una isla central en tu cocina. Si lo tienes, no te lo plantees: ganarás en eficiencia y almacenaje.
Cocinas en forma de U: el almacenaje no será un problema
Otra de las mejores soluciones para las cocinas que necesitan un gran espacio de almacenaje es la forma de “U”. Hablamos de dos paredes largas y una más corta repletas de mobiliario de cocina: espacio para la vitrocerámica, el fregadero y todos los electrodomésticos que necesites. Si es una cocina alargada y estrecha, esta opción es genial.
Cómo distribuir una cocina en paralelo
Si no sabes cómo distribuir una cocina en paralelo, la premisa es clara: coloca los elementos complementarios cercanos entre sí. Y lo mejor es que en este caso tienes varias opciones, ya que puedes ponerlos en los laterales o en la pared frontal a la misma altura. Hablamos de estructuras alargadas que en las paredes cortas están ocupadas por puerta y grandes ventanales o por otra puerta hacia un patio o galería, por lo que no hay muchas más opciones.
Cocina americana o península: la isla para espacios reducidos
Si a pesar de no tener el espacio necesario sigues soñando con una isla, tenemos buenas noticias. Las denominadas penínsulas o barras americanas, no son exactamente lo mismo y no se parecen a nivel funcional, pero sí a nivel estético. Además, una cocina abierta recibe mucha más iluminación y, si te preocupan los olores, solamente deberás instalar una buena campana de extracción.
Cómo aprovechar al máximo tu cocina lineal
Otra de las mejores opciones para las cocinas alargadas y especialmente estrechas es la distribución lineal. Ubicar todos los elementos en una de las paredes te permitirá moverte con mayor eficiencia a la hora de trabajar en la estancia, ya que tendrás la pared frontal completamente despejada generando un pasillo.
¿Una cocina en forma de L? Esta es su distribución perfecta
Cuando nos planteamos cómo distribuir una cocina es importante tener en mente lo que llamamos el triángulo de trabajo. Pues bien, la distribución en “L” es la que más y mejor facilita este concepto, ya que lo vas a tener todo a mano a la hora de cocinar, fregar y almacenar. No descartes esta opción, porque además se adapta a la perfección tanto a cocinas alargadas como a las cuadradas.
Cocina, fregadero, almacenaje: el triángulo que debe estructurar tu cocina
Ahora que ya te haces una idea de cómo distribuir tu cocina, solo te queda ponerte manos a la obra. No te olvides de los tres vértices básicos que deben dar forma al triángulo principal de la estancia: almacenaje, lavado y cocinado son los tres puntos de trabajo más habituales en este espacio, por lo que debemos conseguir que el movimiento entre ellos sea cómodo, práctico y fluido dentro de lo posible.
No olvides que se trata de que te sientas a gusto en cada rincón de tu propia vivienda. Ya que la cocina es un habitáculo dedicado principalmente a labores del hogar, trata de hacer un espacio agradable al mismo tiempo que buscas la practicidad, la rapidez y el almacenaje. Somos conscientes de que esto último es muy necesario en la cocina, pero es posible lograrlo sin saturar la estancia.
