Versatilidad
La colección Tívoli 1928 está diseñada para adaptarse a una amplia variedad de ambientes, tanto residenciales como comerciales. Gracias a su resistencia y acabado, es perfecta para zonas interiores que requieren un pavimento duradero y estético, así como para exteriores protegidos donde se busca un balance entre funcionalidad y diseño. Esta flexibilidad permite que el producto sea utilizado en espacios como salones, oficinas, tiendas y terrazas techadas, manteniendo siempre una apariencia impecable.
Diseño atemporal
Su estética sobria y elegante se basa en líneas limpias y un acabado mate que aportan un carácter moderno, pero sin perder la neutralidad que permite que el pavimento se integre fácilmente en diferentes estilos decorativos, desde los más clásicos hasta los contemporáneos. Esto garantiza que el diseño se mantenga vigente con el paso del tiempo, evitando la necesidad de renovaciones frecuentes por cambios de tendencia.
Estabilidad dimensional
Gracias a su baja absorción de agua y alta calidad en el proceso de fabricación, las piezas de la colección Tívoli 1928 ofrecen una gran estabilidad frente a variaciones térmicas y de humedad. Esto evita deformaciones, grietas o movimientos indeseados, garantizando que el pavimento mantenga su forma y función intactas a lo largo del tiempo, incluso en ambientes con condiciones climáticas variables.
Seguridad
El acabado mate no solo aporta un aspecto estético agradable, sino que también mejora la seguridad de los espacios, ya que ofrece una superficie antideslizante. Esto es especialmente importante en áreas de alto tránsito o donde puede haber presencia de humedad, ayudando a prevenir accidentes y proporcionando tranquilidad tanto en espacios residenciales como comerciales.
Compatibilidad con calefacción radiante
La colección está diseñada para ser compatible con sistemas de calefacción radiante bajo suelo, una solución cada vez más popular para mejorar el confort térmico en interiores. Esto permite que el pavimento transmita eficientemente el calor, asegurando una temperatura agradable y homogénea en toda la superficie, sin afectar la integridad ni la estética de las piezas.